"I am the...APEX PREDATOR!" [Klaus's ID]

Como toda persona, Klaus se formó a lo largo de su infancia, por tanto para saber que es ahora, hay que mirar un poco hacia atrás.

De pequeño fue un chico bastante entregado a los demas, este "demas" se aplicaba a casi todo el mundo. Siempre intentaba conocer a nuevas personas, nuevos amigos pero no solía tener exito alguno por lo que siempre se daba de cabeza con la misma pared. Era el prototipo de un niño curioso que buscaba hacer mucho, tenía cierto grado de hiperactividad y sobre todo era curioso, lo que derivaría mas tarde en una inteligencia bastante prodigiosa.

Sus primeros recuerdos mas duros empezaron a la edad de cinco años, cuando intentaba relacionarse con otros chicos. Se caracterizó por una actitud considerada hacia los demas. Si podía ayudar, él te echaría una mano, si no podía, encontraría la forma de, al menos, evitar que aquella carga fuera demasiado para los hombros ajenos. En realidad era un cobarde pues pensaba que ayudaba a los demas cargando con el peso de ellos en sus hombros y si debía de escoger entre eso o aquello y ambas cosas eran malas, no escogería nada, si tenía que decidir quien se equivocaba o quien estaba en lo cierto y causaría mal dijera lo que dijera, simplemente se callaba.

Siempre fue objeto de los abusos, especialmente físicos lo cual derivaban en peleas de todo tipo que acabaron preparandole para las futuras peleas que tendría pero eso no le impidió sumergirse en el mundo de los libros, donde hallaba la mas grande de las esperanzas, habían libros de todo tipo, todos contaban escenas maravillosas, otras no tan idilicas pero igual de intensas. ¿Quien necesitaba aquel mundo de opresores cuando las propias páginas ofrecian libertad en palabras? Siempre fue incapaz de guardar rencor y de hecho era un ser tan puro que sus enfados se disolvían entre risas y como humano que era, era tan cabezota de dejarse golpear simplemente para demostrar que la resistencia pasiva era efectiva y en cierta parte tenía razon, no hay nada que acobarde mas a un hombre que otro que se deja golpear, que se levanta cada vez que lo tumbas y sonríe con sinceridad.

Aunque en el plano sentimental siempre fue dificil de manejarse, le encantaban las mujeres pero ese mismo deseo era el que hacía que le fuera bastante dificil por ejemplo entrarle a una chica para invitarla a salir, tanto es así que pensaba que las bibliotecas eran buen lugar para una cita aunque pensara lo que pensara era dificil que consiguiera nada No obstante ese panico parece desaparecer con el paso del tiempo, aunque bueno, todo con confianza es mejor, ¿verdad?


Pero con el paso de los años, la soledad hizo mella en su coraza y acabó despertando poco a poco a la bestia que había en su interior o que llegaría de forma indudable.

Su temperamento pronto cambió como la noche es de diferente a la mañana, especialmente despues de aquel, como si una bomba de relojería puesta años atras llegara a su clímax. Su corazón dejo de palpitar por los demas y se volvió totalmente frío, su semblante apenas cambiaba con lo que debía de horrorizarle antaño, no se molestaba en preocuparse porque sentían los demas, sino en preocuparse por lo que él sentía. Sobre todas las cosas se había vuelto una sombra, capaz de adaptarse y cambiar pero sin dejar de ser lo que era, un monstruo. Acabó asumiendo que, no importa lo que ocurra, si quieres algo, tienes tarde o temprano que matar por ello. No obstante se debatía entre dos personas, su mente primigenia la que intentaba controlar aquella sed inapagable, aquel hambre insaciable que no podía terminar nunca, una version bastante mas humana, seria, inteligente pero humana, capaz de divertirse con cualquier tipo de actividad e incluso de preocuparse por otros aunque finja que no es asi. Y la bestia, aquella voz que penetraba en su cerebro y cuando despertaba se sentía tan bien que olvidaba todo lo demas, consumir, romper, destrozar, dominar, aplacar, devorar...todo lo que los demas considerarían malo, amoral, o lujurioso para él era como respirar.

Incluso si eso suponía matar a todo el mundo.


Aunque había probado anteriormente la carne de personas que habían muerto, nunca exploró el placer que le propiciaba el sesgar una vida con sus propias manos y sentir el calor de la vida que manchaba su ropa y rostro con aquel olor tan férrico. Pronto dejó de tener reparos por los demas, para tenerlos con él, solo le importaba una cosa, ser el más temido. No por respeto, no por miedo, sino solo por diversión. La sed de sangre siempre existiría, la necesidad de la carne siempre estaría ahí, si el era una máquina de matar, ¿que podía hacer sino cumplir su cometido, fuera cual fuese?

Su inteligencia afloró tan bien que jamás nadie supo lo que realmente era,, y de hecho solo supo lo que era tras enlazar diversos sucesos de su pasado, sabía que en realidad no era humano aunque siempre hubiera querido ser parte de ellos. Adoptó una mente fría, calculadora y capaz de adaptarse, siempre había fingido que era un humano mas, ¿y no es el mejor depredador, aquel que es capaz de hacerse pazar por su presa? Solo podía alimentarse de las personas, sin importar si eran como él o como cualquier humano corriente, mientras tuviera forma de persona, pareciera una persona entraría en su dieta.

Como cualquier persona y mas siendo un monstruo peca de muchas cosas. Es impaciente en muchas ocasiones, mentiroso (pero tan bueno que es imposible saber si se cree sus mentiras o son verdades) es egoísta y quiere todo lo que le gusta pero es tan obstinado que acabara consiguiendolo. Tiene sangre fría, rabia acumulada y furia. Detesta las personas que son incapaces de escoger porque en la naturaleza el que es indiferente, es aplastado, y aunque no soporte a los débiles es capaz de matar a aquel que sea "indiferente" pues en la naturaleza la "indiferencia" se aplasta sin contemplaciones. Pero como toda persona puede tener su lado bueno, es detallista, inteligente, protector, la pregunta es, ¿que parte del monstruo estás dispuesto a ver, su pelaje y colmillos bañados en sangre, o el brillo de su mirada?

Aunque intentaba controlar su sed de sangre, su lado mas intenso, muchas veces despertaba en contra de su voluntad, algo que tenía que controlar a toda costa. Él es un conjunto de dos opuestos, un lado humano que sigue preocupandose por los demas, y un lado asesino que solo quiere comer. En cualquier caso es inteligente, algo que lo convierte en doblemente peligroso.

Klaus nació el 23 de Junio, hace exactamente 16 años, aunque sus padres le concibieron en Alemania, no viviría alli toda su vida. Fue el hijo unico de la familia Haunter, y su padre, Johan, sangre pura desde hacía aproximadamente siete generaciones atrás, que trabajaba como draconologo estaba ausente grandes periodos de tiempo debido a sus investigaciones, aunque muchas tenían exito se le había apodado "el caza leyendas" pues siempre que buscaba un dragón de leyenda no encontraba nada, no obstante sus ideas eran bastante apreciadas e importantes en los circulos mas avanzados de la draconología, especialmente desde que consiguió pruebas de un dragon que era capaz de vivir en temperaturas bajo cero. No obstante nunca le conoció, su padre falleció en una de sus exploraciones, o al menos nunca volvió.

Su madre, Zelda, tres años menor que su esposo, era sangre mestiza, y trabajaba como escritoria de novelas, tanto muggles como magicas, lo que le permitió encargarse de su educación. Ella fue la que le enseñó todo lo necesario para sobrevivir entre dos mundos, siempre le habló del mundo de la magia aunque no sabía si él efectivamente tendría poderes pero nunca le importó aquella posibilidad. Durante varios años se encargó de educarlo para ser el mejor de los hijos y ñel ayudaba siempre que podía a su madre intentando leer sus libros que eran demasiado avanzados para alguien de su edad y curiosamente a los cinco años era casi apaz de entenderlos siempre y cuando tuviera un diccionario a mano.

Aprendió a leer antes que hablar, pero no tuvo nunca demasiados amigos, por no decir que no tenía amigos. Se metía en peleas para ayudar a aquellos que eran abusados pero solo recibía golpes. Nunca entendió porque nadie le quería como amigo pero no se lo cuestiono. Decidió volcarse en los libros por lo que siempre estaba solo aunque aquella soledad le permitió conocer a las personas, analizarlas, saber que emocion esperaban ver en el otro, que simbolos descubrir y que descifraran si mentian o no...A los nueve años se mudó a Londres con su madre por temas de trabajo, nunca supo por qué pero era feliz een aquel apartamento que tenía y estaba con su madre, asi que no tenía que preocuparse.

A los 10 años hizo su primera muestra de magia que casi provoca que varios libros rompieran una ventana. A los 11 años recibió una carta para asistir a Hogwarts algo que cambio su vida, aunque no sería de los cambios mas grandes. Durante cuatro años, no hizo demasiados amigos, quizas un par pero si descubrió montañas de libros que leer, le encantaba la magia aunque no fuera especialmente bueno en algunas areas, siempre podía recurrir a su memoria para aprobar la parte teorica, pero encantamientos era con diferencia su asignatura favorita. A los 12 años, su madre murió, pasó en primavera, ella le dijo que se encontraba enferma pero que esperaba recuperarse pronto y despues de dos semanas desde la ultima carta donde se enteró que había sufrido una infeccion seera que acabó con su vida. No supero su muerte, de hecho simplemente se mantuvo como siempre, había sido bastante reservado para sus cosas y jamas le dijo nada a nadie. Y cerca de cumplir los 16 tras el quinto año en Hogwarts, empezó el torbellino de sangre.

Estaba en una de las cafeterias cerca de su apartamento donde solía ir, allí vio a una preciosa chica, tendría tres años mas que él pero eso a el no le importó. Acabó sentandose con ella e incluso consiguió hanarse una cita. Se entendían, era algo mas de lo que significaba por si mismo, leían los mismos libros, tenía una vision parecida del mundo, y su belleza le encandilaba, ¿podía pedir algo mas? Bueno, sí, que no quisiera matarlo. Lo descubrió acompañandola a su casa, ella giró en una de las tantas callejuelas de aquel barrio y par acuando quiso darse cuenta ella dijo que adoraba aquella expresion, la de la muerte asomando en los ojos ajenos. No lo entendio al instante y para cuando quiso darse cuenta sintió un fuerte mordisco en su cuello. El intentó sacar la varia pero recibió un seco golpe en el abdomen que hizo ue saliera despedido por el suelo rodando.

Escupío una notable cantidad de sangre mientras intentaba reincorporarse para huir pero ella le dio una simple patada que no debía de haber dolido tanto como lo hizo, sintió varios chasquidos de sus huesos antes de estamparse contra una pared y caer al suelo casi inerte. Pero el destino tenía algo preparado para ambos y una de las obras por alguna razon falló en sus sistemas de seguridad y varios restos cayeron encima de ambos. Ella murió. Y él sufrio heridas de gravedad que requirieron su hospitalizacion inmediata, ademas varios de sus organos fueron sustituidos por los de ella, y mientras aún estaba en aquel coma temporal, que duraría dos semanas, escuchó aquella voz.

"Ahora llevas el veneno de mi sangre, somos uno".

Para cuando despertó notó que la comida que le daban no solo no le gustaba, sino que apestaba. Tras varias horas sintió real hambre y trató de comer cualquier cosa pero no pudo. Probaba un solo bocado y tenía que correr hacia el baño a vomitar. Y lo intentó, una y otra vez, hasta que simplemente acabó cediendo al hambre.

La primera vez suplicó a dios porque le matara, pero su hambre era voraz y acabó alimentandose de una victima que había tenido un accidente de coche, cuando nadie miraba, ya estaba muerto pero se sintio lleno, de forma temporal y como un monstruo. En verano intentó controlar sin exito aquella hamre, pero se hacía cada vez mas fuerte y se hizo peor cuando descubrió aquella maldicion, su piel ardía y su sangre estaba en ebullición, dolía y en cierta parte se sintió tan vivo que se asustó. ¿Por qué hacer el mal le causaba tanta vida? Y tardaría semanas en entender que era porque simplemente estaba diseñado para ello. Era incapaz de aguantar mas de dos semanas sin probar bocado, y ya había matado a varias personas, seguiría luchando contra sí mismo, contra ella, ¿o cuando la locura llegara podría dejarse envolver por su manto de sangre? Dos personas, encerradas en mismo cuerpo.

Pero ya había aceptado lo que era, un monstruo. Pero a veces los monsturos son necesarios. ¿Y que hay mejor que ser el depredador definitivo?

Empieza su séptimo curso en Hogwarts, no tiene intencion de unirse a ingun bando aunque cuando está mas sobrio de locura parece tener inclinaciones a la resistencia, quizas porque es una via de alimentarse bastante facil. La resistencia es menor en numero, si se los comiera a ellos, ¿que haría cuando ya no estuvieran? Siempre quedarían el resto de muggles y magos. ¿Verdad?

Si bien Klaus es un mago que ha sido mordido/infectado/transformado por un vampiro y eso le convierte en uno, en realidad es lo mismo que le pasaría a cualquier persona si un hombre lobo los muerde en luna llena. En su caso si eran magos siguen siendo magos, porque pueden realizar magia, como se ha demostrado, por lo tanto no som hombres lobo como tal, sino que son hibridos entre mago (que es una raza derivada de los humanos y compatible con ellos) y un hombre lobo (que no tiene porque saber magia). Asi pues se puede considerar a Klaus como un vampiro a secas (igual que se puede considerar a Lupin un hombre lobo) aunque en ambos casos es mas exacto decir que son magos hibridados con dicha criatura mágica.

Lo mismo se aplica a las semi veelas, solo son el producto de la hibridacion entre un mago y una veela o un gigante. En cualquier caso, ademas de haber sido mordido, Klaus recibió diversos organos de su fallida asesina que causaron una transformacion mucho mas intensa, hasta tal punto que su organismo colapsó y se adaptó al invasor. Dicho de otro modo, la posibilidad de comer lo mismo que los demas, o de alimentarse de algo que no fuera carne humana o sangre se anuló por completo. Es como cualquier mago convertido en vampiro salvo por el hecho de que en esos casos solo recibieron un mordisco y él se llevó unos cuantos órganos de su agresora, lo cual hace que tuviera una transformacion insual.

Por supuesto posee las mismas desventajas comunes a todos los vampiros y las mismas ventajas, sigue siendo uno de ellos al fin y al cabo pero posee ventajas particulares de su "maldicion" (aunque es producto de aquella operacion médica y que al ser asimilados ya no tienen marcha atrás) y desventajas propias, por ejemplo la de ser incapaz de comer cualquier cosa que no sea café o chocolate.