Ileana Juniper Blythe • ID

Es muy astuta e inteligente, puede descifrar acertijos muy rápidamente y es difícil que se la engañe con timos e historias irreales, esto es porque ella tiene una imaginación sin límites, y conoce cada historia que alguien pudiera imaginarse. Físicamente posee un umbral de dolor demasiado alto, no siente el frio que penetra la piel ni el fuego que te funde los huesos. La sangre y las heridas jamás la han asustado, y lo unico que siente al tener un hueso roto es un calambre. Nadie ha encontrado explicación para esto, más que la del poder de su mente para poder controlarse cuando esta a punto de ser débil. En cuanto a emociones, no las controla tanto, suele llorar sin siquiera darse cuenta cuando se le rompe el corazon o siente impotencia, es conocida por desatar risas imparables en momentos inapropiados. No acepta regaños y suele disipar su mente cuando alguien la sermonea. Los maestros no la entienden y suelen perder la paciencia con ella, pues tiene muchísimo potencial y sin embargo para todos lo "malgasta". Es bastante mala con las responsabilidades, si se le da un animal o bebé para cuidarlo, es posible que los resultados sean desastrosos. No tiene atencion dispersa, es bastante observadora... pero el ser tan detallista hace que a veces se vaya en medio de una conversación sin avisar ni despedirse. Usualmente su mente esta siempre un paso por delante de su lengua, asi que muchas veces ha creído fervientemente haber dicho algo, cuando unicamente lo pensó. Sus amigos dicen que hay que leer mentes para saber lo que quiere en realidad. Es ocurrente, elocuente, versátil en cuanto a sus actitudes y tiene un gran poder de convicción con los demás. Si decidiera seguir el camino equivocado, es un arma letal...

Érase una vez...

Una familia casi perfecta, el padre era Riccard Blythe, un escritor muy famoso en el mundo muggle, profesor de Historia de la Magia en la Escuela Durmstrang de Magia y Hechiceria. La madre era Perséphone "Percy" Blythe (de soltera Wilkes). Perséphone era una bruja de recursos muy limitados, vivía sola en un complejo de apartamentos en las afueras del Londres muggle. Riccard por su parte era un hombre acaudalado. Literalmente poseía un castillo en Inglaterra muggle, en Milderhurst, donde se inspiraba en los pasillos desiertos y en el eco de su propia voz cuando quería escribir una nueva obra. El destino se las ingenió para juntar a Percy y Riccard, se conocieron pensando que eran muggles, quizá con la esperanza de escapar del atroz destino al que se enfrentaban en ese momento (la Segunda Guerra Mágica). Aquel fué el único secreto que se guardaron, pues desde que se conocieron se juraron amor eterno. 10 años despues de vivir con bajos perfiles, en una vida acomodada y feliz, Perséphone llegó a casa con la agridulce noticia de que estaba embarazada. No porque no quisiera tener un hijo de Riccard, si no por lo que aquello significaría en un futuro. Su bebé tambien estaría destinado a conocer el mundo mágico...
Cuando Riccard se enteró, sus miedos fueron los mismos, y asombrosamente, ninguno de ellos se atrevió a decir nada al respecto. Esperaron el bebé con más ansias de las necesarias, y cuando al final el dia del parto llegó, llamaron a su primogénita Ileana Juniper Blythe. Heredera del castillo Blythe en Milderhurst. Todo iba a ser pefecto. Percy y Riccard sin saberlo estaban planeando hacer exactamente lo mismo en el mismo día, antes de que Ileana cumpliera los 10 años y fuera enviada a Durmstrang, o Hogwarts, o Beauxbatons, o dondequiera que sea elegida. El día llego, Percy estaba camino al castillo con Riccard, conducía una vieja Chevy con el escape averiado, habia rechazado muchas veces que Riccard le comprara un auto nuevo, pues la Chevy fue lo único que se había podido comprar Percy con su esfuerzo.
La colina hacia el castillo era muy empinada, y en cada viaje el Chevy parecía dar su último aliento, lastimosamente justo aquella tarde, fue verdaderamente el último aliento del Chevy y de Percy Blythe.
La camioneta rodo colina abajo sin dejar a Percy alguna escapatoria.
El funeral y el entierro fueron realizados en privado en el Castillo Milderhurst. Riccard quedó devastado, y por unos meses llego hasta olvidar que tenía a Ileana a su cargo. Ileana creció independiente siempre, pero rodeada de amor, confianzas, y sin saberlo, de mentiras. Un año despues de la muerte de Perséphone, Riccard conoció a una mujer de 20 años y se casó con ella, era muggle, que era su editora en un editorial en el que habia estado publicando sus obras los ultimos años. A primera vista se podia decir que lo único que queria aquella mujer era quedarse con toda la fortuna de Riccard. Feliciana se llamaba aquella mujer, de origen italiano. Riccard no confió su secreto a nadie, nisiquiera a su nueva esposa. Literalmente, aquello lo siguió hasta su tumba. El fallecimiento de Riccard ocurrió 3 meses despues de casado en el día del cumpleaños de su hija Ileana. Ella sabia que Feliciana lo había asesinado, pero no podia acudir a nadie. El montón de abogados muggles llego en contra y a favor, por tratarse de una fortuna tan grande, se descubrio pronto que en el testamento de Riccard, sus únicas herederas eran Perséphone e Ileana, y por otra parte, Ileana tambien había recibido algunos ahorros que tenia su madre en un banco extraño de nombre "Gringotts". Como Ileana era menor de edad, se resolvió que antes de poder reclamar su herencia, debía convivir con su madrastra hasta cumplir los 16. Sólo entonces podía ser ama y señora de Milderhurst Castle y todas las pertenencias de su padre. Su madrastra por mientras no podia tocar nada del dinero, solo se convertiria en dueña de todo si Ileana llegara a fallecer.
Una mujer sin escrúpulos como Feliciana solo tenia que pedir tiempo e ideas para asesinar a Ileana antes de que sea tarde. Por lo que Ileana decidió escapar de su casa a razón de una beca de estudios. Asi evitaría a su malvada madrastra por 5 años.
Cuando Ileana pudo instalarse sola, creyo que estaba sola. Una carta llegó atada a las garras de una lechuza que atraveso la ventana de la habitacion del hostal donde se quedaba hospedada. "Bienvenida a Hogwarts". Ileana investigo aquello, y sin entender aún muy bien, investigó el pasado de sus padres.
Astuta como ella sola, supo enseguida todo lo que ocurría, y aún asi rechazo el ingreso a Hogwarts y a Beauxbatons por 3 años, hasta que en 4º año tuvo que integrarse y recibir actualizaciones y cursos especiales para ayudarla a desarrollarse como hechicera.
A escondidas desarrolló su don de transformarse en un guepardo. Aquello era ilegal, hasta que cumpla al menos los 16. Esperar por tantas cosas hasta esa condenada edad acabó con la paciencia de Ileana.
4º, su primer año en Hogwarts fue terrible, sus notas no eran buenas y sin embargo era brillante en cada asignatura. Parecía estar en una constante depresión que le impedía hacer amigos. Se sentía sola y casi siempre pasó desapercibida.
Al culminar su primer año en Hogwarts, se dio cuenta de lo poderosa que era, al regresar al Londres Muggle en vacaciones. Un grupo de 4 hombres intentó asaltarla en el metro, y Ileana pudo defenderse solo con los dones y perseverancia que habia aprendido en el mundo mágico. Quiza era tiempo de dejar de huir y regresar a tomar lo que era de ella.
A punto de cumplir los 15 años, Ileana regresó a Milderhurst, donde Feliciana habia llevado a otro hombre a vivir con ella. Muy altanera e imponente, Ileana echó a aquel hombre y amenazó violentamente a Feliciana con destruirle la vida si continuaba ambicionando lo que no le pertenecía. El trauma fue tan grande que Feliciana también se mudo de Milderhurst y desapareció del mapa.
Ahora, Ileana vive sola y despues de haber cumplido los 16 años paso a ser acreedora de toda la herencia de sus padres, incluyendo Milderhurst donde ya nadie puede atormentarla. Lamentablemente despues de hacer una auditoria a los bienes que ella posee descubrieron que sus padres llevaban una vida muggle y por lo tanto ella debia renunciar a esa vida. Su castillo y su herencia se quedaron congelados hasta que pudiera invertirlos de otra manera en Londres mágico.
Ignora muchos detalles de la guerra mágica actual pues ninguno de los problemas le afecta de manera directa... excepto claro, por lo de su herencia. Y sin embargo nota la penumbra en los pasillos de Hogwarts. Despues de haber aguantado tantos años en esa mugrosa escuela era su ultimo año, era prefecta y no estaba dispuesta a que una guerra arruine lo que podría ser su gran momento.