Ramsay Paunescu (ID)

Es un chico rebelde, extremadamente independiente y que adora picar a los demás y hacer bromas incluso en los momentos más inoportunos, además de contar con un humor negro bastante particular. Le gusta ser el centro de atención en todo momento y suele pavonearse de sus habilidades en la escoba muy a menudo. Su actitud chulesca le lleva a veces a no decir lo que en realidad piensa o a llevarle siempre la contraria a los demás con tal de no verse inferior. Pero en el fondo es buena persona y acaba sufriendo en silencio cuando se arrepiente de sus acciones y no tiene valor para pedir perdón.

Es pésimo en los estudios, no aspira a graduarse con buenas notas, así que en un principio siempre tuvo el quidditch como primer objetivo. Desde que sus planes se torcieron con el aumento de poder de Lord Voldemort, su único objetivo es el de unirse a la Resistencia y ayudar en todo lo que pueda.

Es muy bueno jugando a todos los deportes o juegos donde la competitividad sea importante. Sus padres lo metían en todo tipo de actividades para canalizar toda su energía, aun así su hiperactividad le impide relajarse cuando le provocan.

Desde la llegada de la adolescencia a dejado de ver a las chicas como simples compañeras de clase, ahora las ve como algo más, incluso se sorprende a si mismo fantaseando con algunas de las bellezas de la escuela. Aun así su extroversión y su impulsividad no le permitirían mantener una relación seria... o eso cree.

Ramsay creció en la acogedora y hogareña casa de los Paunescu, una familia de origen Rumano de extrañas tradiciones mágicas. Tiene un hermano mellizo unos segundos más pequeño que él con el que se lleva bastante bien, mataría por defenderlo. Desde pequeño mostró ser el más competitivo y activo de los dos hermanos, hecho que sus padres intentaron resolver en varias ocasiones con pequeños castigos que lo ayudasen a recapacitar y apuntándolo a varios deportes, pero nada lo cambiaría.

Cuando recibió la carta de Hogwarts, los padre supieron que su estancia allí les acarrearía problemas, pues el joven no estaba preparado para aprender a ganar y perder. Ramsay acabó entrando en Gryffindor enorgulleciéndose de pertenecer a la casa de los fieros y valientes leones. Al principio le resultó duro acostumbrarse a que no siempre se podría salir con la suya, algo que le ayudo a madurar y aplicar sus habilidades empáticas. Con el tiempo fue formando su propia pandilla de amigos y a dar pequeñas muestras de su talento para los juegos o deportes competitivos. Es el capitán y el golpeador del equipo de Quidditch, sin embargo últimamente la diversión y la alegría que le hacían amar aquella escuela se han ido diluyendo como un azucarero en una taza de té.
Ha visto como varios de sus amigos han debido abandonar la escuela, han sido capturados o simplemente han desaparecido por ser simplemente hijos de muggles. Es una situación que no soporta, y no le importa recibir los duros castigos de la directora cuan escucha a algún alumno hablar bien de los que no son sangre pura.

Para ayudar a su familia muestra una cara que en realidad no le pertenece, pues no cree en los ideales de los mortífagos. Sin embargo, en cuanto este año acabe tiene pensado unirse a la Resistencia e iniciar un cambio que los lleve a la situación anterior.